La minería es la actividad económica más importante del país, la cual produce cerca del 60% de los ingresos por exportaciones (Dourojeanni, 2009).
Según Miguel Santillana, al cierre del año 2009 el negocio del oro en el Perú significó 5,700 millones de dólares, de los cuales el 9.5% proviene de Madre de Dios, es decir que aproximadamente 570 millones de dólares provienen de esta región.
En Madre de Dios existen supuestamente 2800 peticionarios de los cuales sólo 16 tienen concesiones formales, se puede hablar que el 98% de la producción de oro en Madre de Dios proviene de la minería informal, es decir, es oro ilegal (Santillana).
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La principal y peor consecuencia de la minería es la contaminación del agua, del suelo y del aire debido a la exposición al aire del material extraído y a los desechos de los procesos mecánicos y químicos usados para separar el mineral. (Dourojeanni, 2009).
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Si aún las más cuidadosas e inteligentes operaciones mineras producen contaminación y otros problemas serios, cuando la minería es informal e ilegal, los perjuicios ambientales y sociales son extremos y, por desgracia, esa modalidad es frecuente en la Amazonía (Dourojeanni y Padua, 1992).
El director general de Minería del Ministerio de Energía y Minas, Víctor Vargas, reconoció que esta actividad ha dejado de ser exclusividad de Puno y Madre de Dios para extenderse a todo el territorio nacional (RPP Noticias, 2009).
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